lunes, 13 de enero de 2020

Tu vestido amarillo

No se que te lleva a un club cannábico.
No se que te lleva a beber after work.

Bueno, si lo se, por experiencia.
Pero en la superficie y no en profundidad.

No se con detalle por que eres desdichada,
No entiendo que tengas inseguridades.

Porque solo nuestras inseguridades nos parecen lógicas
E irracionales cuando vemos las de los demás.

Solo tienes que ponerte ese vestido amarillo,
Con su corte enseñando el muslo.

Solo tienes que mirar, sonreir y hablar
Para encandilar al mundo entero.

La montaña mágica



¿Qué significado oculto tiene el número once?
¿Es posible que la montaña esté hueca?
¿Es posible que hayan sectas escondidas?
¿Es posible que hayan puntos mágicos en los que te puedas desorientar y desmayar?
¿Fue el cremallera o el funicular quien sufrió un nefasto accidente?
¿Por qué hay humo de repente?
¿Estas rocas tienen forma de persona?

No hay nada mágico. Generalmente nada lo es.
Solo en la montaña, tus palabras.
Solo en mi ciudad, tu presencia.
Solo en la alquimia, sales de plata.

TÚ creas la mágia.

lunes, 25 de noviembre de 2019

Eleven stands for two

No soy una persona sino la persona que debería ser.
No soy una persona sino la persona que esperan que sea.
No soy una persona sino los grilletes que me sujetan.

No soy una persona sino la cabeza en la nubes.
No soy una persona sino las estrellas por las que brillo.
No soy una persona sino los sueños que sueño.

Pero no soy una persona si no soy soñado.

Soy, soy, soy.
Pero no soy, no soy, no soy.

domingo, 27 de octubre de 2019

Cielos desérticos



El cielo está despejado y aún así, no vemos un futuro certero al final. No pasa nada, de una forma u otra terminaremos encontrando las respuestas. En la ciudad nunca se veían las estrellas y sin embargo ahora ahí estás, mi estrella en el cielo vacío.

En la intimidad de tu abrazo, cuando todo desaparece y el tiempo se detiene, espero que mi respiración te de tanta paz como yo encuentro en la tuya. Que los latidos de mi corazón te den tanto calor como hacen los tuyos conmigo. Que encuentres en mis brazos el refugio que encuentro yo en los tuyos.

Que las dificultades, las dudas o la apatía sean solo un peso liviano y veas luz, cómo la veo yo cuando miro hacia arriba y te encuentro ahí, mi estrella en el cielo vacío.

miércoles, 5 de junio de 2019

Figura en una finestra

Salvador Dalí, Figura en una finestra


Mi día se ha vuelto algo melancólico cuando esta mañana he visto una vieja foto.

A través del encuadre, los colores, la ropa, sus (nuestras) poco saludables costumbres del cigarrillo, la lente por la que se asomaba a ver el mundo, el recogido del pelo y su inconfundible flequillo he pensado espontáneamente «Qué buenos tiempos. Qué días tan felices y tan fugaces.»

No me ha sorprendido el contenido de mis reflexiones si no su naturalidad.

¿Realmente era consciente de ello en aquel entonces?
¿Sabía que estaba viviendo algo único?
¿Lo valoraba en su justa medida?
¿Sabía siquiera que estaba viviendo?
¿Es la distancia y la perspectiva que el tiempo nos brinda lo que me ha hecho pensarlo así?
¿O acaso me enredo, como entonces, con las mismas viejas trampas de la memoria y la idealización?

Qué más da. Hoy es un día melancólico.

domingo, 3 de marzo de 2019

Cluster C

Nunca me han gustado las comunidades, los colectivos, las identidades, las etiquetas. Religiones, rituales, tradiciones, fetiches, banderas, bandos, ideologías, personalidades tipo, género musical, que se yo… No lo veo, no lo entiendo, me aburre y me da pereza. Nunca fui ninguna cosa porque siempre sentí que soy muchas. Nunca vi una sola cosa porque detrás de la fachada habían demasiadas.

Después de lo ocurrido estos últimos meses quizá ha llegado el momento de aceptar que seis años no son un bache. Que no hay nada malo en mí y que la persona que solía ser simplemente ya no volverá. Quizá deba aceptar que tengo una enfermedad, que tendré que convivir con ella toda la vida y, muy a mi pesar, dejarme colgar la etiqueta.

lunes, 31 de diciembre de 2018

Gravedad



Estaba flotando en el espacio sin rumbo, a la deriva. El universo caótico y aleatorio se desmoronaba y yo, pensé que iba a enloquecer.

De pronto, sus ojos pusieron luz y su voz me atrapó.

—Ven. Ven aquí —me dijo abriendo sus brazos.

Sus palabras me dieron razón, me pusieron dirección y me dejé arrastrar por la fuerza de su gravedad. Entré en el hogar que es su pecho y descansé mi cabeza en él.

Sus brazos me sujetaron fuertemente dándome equilibrio y los latidos de su corazón me dieron el tempo para no perderme. Entonces sus piernas cogieron impulso y empezó a danzar deteniendo por completo el universo que giraba endiabladamente a nuestro alrededor.

En mitad de aquel estático universo nos contoneábamos como un dragón volando bajo el agua, como una sirena nadando por el cielo. Orbitando uno alrededor del otro, como dos planetas enamorados.

miércoles, 28 de noviembre de 2018

Loop



Horas muertas. Desayunos al mediodía. La pagina de la libreta en blanco. Los sueños recurrentes. Palabras vacías. El tic-tac del reloj en plena noche. Pánico. Sofoco. Ahogo. Madrugadas en urgencias. La medicación. Obedecer. Desobedecer esperando obtener resultados distintos. La soledad. La incomprensión. Las miradas. La anhedonia. El miedo a amar. La resignación. La fotofobia. La alta autoestima. La baja autoestima. La montaña rusa. La toalla arrojada. Un grifo goteando en el silencio de la mañana. Las tardes extrañas. Las noches eufóricas. Los despistes. Las distracciones. Las abstracciones. Los temblores. Sofoco. Ahogo. Madrugadas en urgencias.

miércoles, 21 de noviembre de 2018

Exit Music (For a Film)


Recuerdo un día estar viendo la television y hacían una película preciosa.

Habían escenas de amor en blanco y negro, deducciones magistrales de un detective genial y una huida espectacular en coche por el espacio sideral. Entonces de repente la luz se fue y cuando volvió de nuevo, solo habían anuncios.

Llevo mucho tiempo viendo anuncios y he terminado por apagar la tele.

domingo, 3 de septiembre de 2017

Connubio



Un gran jardín con árboles majestuosos.
Oscuras enredaderas tocando el cielo.
Las columnas de marfil como padrinos magníficos.
Las penas, testigos;
Las alegrías, plañideras de honor.
Un estanque donde nadarán los invitados.
Los tubos de un órgano soplando entre las ramas.
Altar de arena donde esperaré.
Y tu, amada por nadie que a todos arropas por las noches,
El sol te llevará de la mano hasta el altar.
La prometida mas hermosa
Vestida de novia pero no de blanco.
Saturno nos entregará su anillo.
El paso de las estaciones oficiarán la ceremonia.
Nos daremos el “Sí, quiero” en una unión eterna.
Volarán las cenizas entre aplausos mientras, en lo alto del campanario,
Sylvia Plath toca enérgicamente su gran campana de cristal.